Encuentro de Hermandades en Barcelona
6 de diciembre de 2004… Y nos fuimos a Barcelona.
Se dieron una serie de circunstancias increíbles, como para realzar más si cabe este año lleno de actos y celebraciones por el XXV aniversario de la fundación de nuestra Hermandad. Esto ha sido muy especial por muchas razones. Primero y antes que nada voy a explicar el por qué de este viaje:
- Se cumple el 150 aniversario del Dogma de la Inmaculada Concepción.
- La Hermandad de la Macarena de Barcelona cumple su 40 aniversario fundacional.
- Es tradición en la ciudad condal que procesione la Inmaculada el día 8 de diciembre, pero la Agrupación de Cofradías cuyo presidente es nuestro hermano Manolo Zamora, propone que sea la Virgen Macarena la que excepcionalmente lo haga este año para iniciar con este acto todos los previstos para la celebración de su aniversario.
- Y nuestra Hermandad es invitada por la de la Macarena para que con nuestro paso y nuestras costaleras procesione la Virgen por Barcelona.
Casi ná… y como a nuestra Hermandad la palabra reto se le ha quedado chica, sobre todo a nuestras costaleras, pues nos fuimos a Barcelona.
A las 21 h. del 6 de diciembre nos dimos cita en el parque para coger el autobús, y allí entre risas y nervios iniciamos el viaje cargados de ilusiones, hojaldrinas, bombones, bollos de aceite, anís y café, que de todo había para una noche larga y fría.
Íbamos un poco expectantes y por qué no decirlo, asustadillos, porque la responsabilidad era enorme y la distancia mucha, el tiempo amenazaba lluvia, y en fin, aunque sabíamos que Manolo Zamora (presidente del Consejo General.de Hermandades y Cofradías de Barcelona) y nuestra Junta de Gobierno lo tenían todo controlado con la Hermandad de la Macarena y el Consejo General de Hermandades, siempre está ese gusanillo que te anda por dentro y te hace dudar y temer por cualquier cosa, porque no es lo mismo procesionar en Alcaudete, con el calor de los tuyos, que en una gran ciudad como Barcelona.
Un par de días antes habían llegado Jose, Sergio y Carmelo, miembros de nuestra Junta de Gobierno con sus respectivas mujeres para colaborar en el traslado de nuestro paso, en Barcelona ya desde hacía un par de días, a la Catedral con los hermanos de la Macarena, y esto merecería un capítulo aparte, pues según nos contaron y por las fotos que vimos fué para vivirlo. Los hermanos de la Macarena no quisieron trasladar el paso en ruedas desde la Hermandad hasta la Catedral, sino que se quitaron el gusanillo costalero y se metieron dentro, cura incluido, y así escoltados por la policía llegaron a la Catedral.
Deciros que desde que salimos de Alcaudete algo muy especial iba sucediendo: el viaje fue fenomenal y todos, a pesar de los nervios, estábamos radiantes de alegría. En el autobús compartimos unas horas estupendas de risas, chistes y poco dormir. Y chiste va chiste viene y sin apenas dar una cabezada a las ocho de la mañana llegamos a Barcelona.
Fuimos directos a la residencia salesiana, y Manolo Zamora vino a recogernos para ir a Badalona, y como buen cicerone nos dio un paseo por la ciudad, y desde la calle del Mar una de las más comerciales llegamos a la playa, cervecita en el paseo marítimo y de vuelta al autobús para ir a la casa Hermandad de Manolo, del Santísimo Cristo Redentor y Nuestra .Señora de la Soledad de Badalona .
Sabíamos que nos invitaban a comer, lo que no sabíamos era con cuánto cariño lo iban a hacer. Fueron momentos muy emotivos, Manuel Martínez, Hermano Mayor, nos contó de una forma preciosa la historia y el proceso de consolidación de esta Cofradía. Y como si nos conociéramos de toda la vida, pasamos a su sede donde nos habían preparado una comida por todo lo alto.
Fue muy emotivo el intercambio de recuerdos entre las dos Cofradías. Muy curioso también ver a Manolo Zamora, que cuando hablaba de su Hermandad, nadie sabía a cuál de las dos se refería, ya que tenía a sus dos Hermandades juntas, y él, por supuesto, no cabía en sí de gozo ante tal circunstancia. La sobremesa nos supo corta, si no hubiéramos tenido que estar a las 20 h. en la Catedral de Barcelona para terminar de montar nuestro paso con la Macarena, seguro que nos dan las tantas de lo bien que lo estábamos pasando, que cuando la gente se arranca a cantar el tiempo se para.
8 de Diciembre, a las 10 h. en la Iglesia Catedral. La preocupación que teníamos con el tiempo desapareció, el temporal de lluvia y viento que nos precedió dio paso a un día esplendoroso de primavera.
Nuestras costaleras esas mujeres valientes que son la bandera de nuestra Hermandad, se cambiaron, se fajaron y se transformaron para ser, como les dijo su capataz: «mensajeras de la fe y del amor; y dar testimonio de como en la calle también se reza, de como en la calle, se debe, se puede y se hace Iglesia, para que quienes no ven, vean, y quienes no creen, crean, y todos reconozcan que eres nuestra Madre y que contigo todo lo podemos», en el Museo del Calzado, sede de la Cofradía de San Marcos Evangelista, considerada la más antigua de Europa (1202).
Y a las 11,15 h. del día 8 de diciembre la puerta de Sant Iu (San Ivo, patrón de los juristas) de la Santa Iglesia Catedral se abrió, y después de dar la primera «levantá” el actual Cardenal Lluís Martínez Sistach, la Macarena comienza su recorrido por la ciudad condal. Por el exterior del ábside al carrer del Bisbe (calle del obispo), plaza Sant Jaume, donde hubo recepción del Ayuntamiento, Carrer Ferrán dónde la Hermandad del Rocío abrió sus puertas y obsequió con flores y cantos, parroquia de Sant Jaume y las Ramblas, en la calle Hospital los pétalos de flores volaron por los balcones rindiendo homenaje a la Señora y a la plaza de San Agustín y parroquia del mismo nombre donde dió la última «levantá” el presidente del Consejo General de Hermandades y Cofradías de Barcelona, Manolo Zamora.
Una vez dentro del templo los aplausos inundaron la iglesia, cuando las costaleras salieron del paso no daban crédito a la emoción que allí se concentró y al homenaje que se les dió. Celebramos la Eucaristía oficiada por Mossèn Toni Deulofeu y al terminar nos invitaron a comer antes de partir de vuelta para Alcaudete.
Nuestra Hermandad de las Nieves no podrá olvidar nunca la experiencia vivida. Esperamos y creemos que los hermanos de la Cofradía de la Macarena de Barcelona y los miembros del Consejo de Hermandades de dicha ciudad tampoco lo olvidarán Este acontecimiento marca un antes y un después del ocho de diciembre de 2004. Para los que tuvimos la suerte de vivirlo nos faltan las palabras para poder contarlo y transmitir aquellas vivencias inolvidables, y los que no pudieron asistir solo podrán intuirlo a través de la emoción de nuestro de recuerdo.
Hemos demostrado entre todos que la colaboración de las Hermandades pueden dar resultados espectaculares, y esperamos que este encuentro sea el primero de muchos venideros, porque la distancia ya hemos visto que no es un obstáculo.